Cuaderno de bitácora del jefe médico del USS-Andalucía.

Hace una semana recibí una llamada del Cuartel General de la Flota, como nuestra nave se encontraba atracada en la base estelar, preparándose para la próxima misión, pensaron que podía encargarme rápidamente de un asunto cercano a la base estelar.

La base estelar se encuentra cerca del límite del espacio de la Federación, cercana a una gran nebulosa multicolor. Construyeron allí la base estelar ya que la nebulosa tiene características misteriosas que la hacen muy diferente a todas las nebulosas que se han analizado previamente por la Federación. Por eso, una de las misiones de la base estelar es estudiar esa nebulosa.

Dentro de la nebulosa existe una civilización que es avanzada, pero con la que los contactos han sido muy puntuales. Pese a ello, parece ser que esa civilización esta estudiando si se suma a la Federación o no.

El Mando de la Flota ha recibido una comunicación de esa civilización, los Luminis, de forma indirecta. No está claro qué significa, pero parece ser una especie de petición de ayuda.

Ante ese mensaje, la Federación quiere mandar una pequeña misión para verificar la información. Para poder hacerlo solo existe una nave en toda la flota capaz de adentrarse en la nebulosa, al menos eso creen, aún no se ha probado. Es una nave un poco mayor que una lanzadera estándar, con un casco reforzado con una nueva tecnología regenerativa y auto reparadora; así como generadores de escudos con una tecnología experimental, que genera escudos multifásicos junto con una especie de protección orgánica multicapa. Una tecnología que no llego a comprender, me gustaría saber cómo han enlazado las estructuras orgánicas con elementos puramente energéticos.

Para esta pequeña misión de exploración, la flota me ha pedido que acompañe al ingeniero jefe que ha creado la nave, el comandante Dung, y a una científica de la flota que lleva mucho tiempo estudiando la nebulosa, la capitana Thulis. Quieren que vaya por si hay algún tipo de emergencia en el planeta, para que pueda hacer una evaluación.

Me despido de mi tripulación y en apenas un par de horas desde que recibí la petición de la flota, nos dirigimos hacia la nebulosa. La lanzadera es muy rápida y en poco tiempo llegamos a las capas exteriores de la nebulosa.

La composición de los gases que forman parte de la nebulosa, son muy extraños. Aparte de las mezclas de gases habituales, existen puntos de concentración de energía telarónica super concentrada, de origen desconocido. Junto con una especie de polvo ,más denso de lo esperado, que tiene concentraciones variables de partículas exóticas no bien identificadas. Los optimizados sensores de navegación permiten a la nave ir esquivando las concentraciones extrañas y peligrosas, es una navegación complicada y muy movidita. El comandante Dung explica que ninguna nave grande de la flota lograría cruzar esta nebulosa sin sufrir daños catastróficos. Ese comentario me lleva a pensar que, si nos ocurre algo, estaremos solos. Prefiero no pensar mucho en ello para no agobiarme. Tras unas horas de bamboleos y giros acrobáticos dentro de la nebulosa, nos acercamos al interior de la misma. Los sensores indican que el centro de la misma parece ser un gran hueco. Pero no está vacía, hay dos sistemas solares dentro de ella, uno compuesto por 10 planetas de distintos tamaños y composiciones orbitando lo que parece una enana blanca; y el otro sistema lo forman 7 planetas que orbitan alrededor de una gigante roja.

Justo cuando salimos de la nebulosa nos golpea una gran onda de choque. Cuando me despierto, descubro que llevamos inconscientes varias horas, mis acompañantes están vivos, con pequeñas lesiones, pero no responden a mis llamadas. Los tumbo en las pequeñas literas que hay en el centro de la nave. Al intentar utilizar mis aparatos médicos para evaluar su situación, descubro que no funcionan. Pregunto a la computadora de la nave qué ha sucedido y no logro una respuesta coherente, el ordenador está balbuceando. No puedo evitar empezar a sentirme cada vez más nervioso. Miro hacia el exterior y descubro que la nave flota a la deriva, nos vamos acervando podo a poco al sistema solar más cercano, el presidido por la enana blanca. Compruebo los sistemas de la nave y descubro que toda la electrónica esta dañada, no hay ningún sistema que funcione correctamente. Por fortuna descubro que los paquetes de neurogel, como los que lleva la USS-Andalucía, están intactos y funcionan perfectamente. Poco a poco logro transferir los sistemas a los paquetes neurogel y en poco más de una hora consigo que la nave vuelva a estar operativa; al menos los sistemas principales. No funciona el replicador de comida y numerosos sistemas auxiliares no responden adecuadamente, los apago. Rebusco entre los suministros de la nave y aparte de raciones de supervivencia y diversas cosas que me van a venir muy bien, descubro que los aparatos electrónicos que no estaban conectados, no se han visto afectados por el choque energético Encuentro un equipo médico de emergencia que funciona y logro hacer un diagnóstico de mis compañeros. Ambos tienen daños relevantes en sus cabezas, no me voy a arriesgar a despertarlos gasta que no los pueda tratar en la base estelar. Curo sus heridas y tras terminar me paro a evaluar mi situación. Estoy solo. Pero no estoy dispuesto a irme, mis acompañantes están estables y la Federación me ha pedido hacer una misión, voy a continuar mientras no sea un peligro mayor para nosotros.

Mientras evaluaba a mis compañeros, he pedido al ordenador de la nave que analice qué nos ha sucedido. Por fortuna tiene suficientes datos para darme una respuesta.

De todos los planetas que hay dentro de la nebulosa, solo dos de ellos están habitados. El más lejano orbita a la gigante roja en 4 posición y por lo que detectan los sensores parece una civilización avanzada normal, pero sin casi satélites. El otro planeta habitado orbita la enana blanca, esta mas cerca de mi nave y parece que está sufriendo algún tipo de problema global ya que se detectan muchas emisiones de radio o similar pero aparentemente incoherentes, que no logro descifrar. Y además no logro detectar ninguna nave en todo el interior de la nebulosa.

Según me voy acercando al planeta, para escanearlo mejor, detecto como de la superficie del mismo sale un gran cohete. Parte de la cara opuesta a la estrella, pero cuando se aleja, la gravedad de la estrella lo atrapa y en poco rato impacta contra la superficie de la enana blanca. En ese momento, del punto de impacto surge una gran erupción de energía. Instintivamente apago todos los sistemas de la nave, menos lo que dependen de los paquetes de neurogel, y descubro que la onda de energía ocupa la mitad del espacio de la nebulosa muy rápidamente. Satura todo el sistema planetario de la enana blanca, pero se disipa justo antes de llegar al planeta habitado que orbita la gigante roja.

El análisis de la energía muestra que es del mismo tipo del que nos impactó al salir de la nebulosa. Analizo el planeta del que salió el cohete y descubro que la multitudinaria población, varios miles de millones de seres, sobreviven en condiciones muy duras, al menos la mitad que se encuentra frente a la estrella. Casi no detecto fuentes de energía, pero poco a poco voy viendo cómo se van activando sistemas electrónicos por la superficie del planeta.

Por fin logro establecer un canal con el planeta y el traductor universal me traduce todo, menos mal que funciona, no soy un gran lingüista.

Desde el planeta me confirman que ellos han mandado el mensaje, que es un mensaje de petición de ayuda. Esperaban que viniese una flota a ayudarles y no una pequeña nave, están desilusionados con la Federación. Yo les explico que no entendimos el mensaje y que hemos venido a evaluar la situación y que dependiendo lo que descubramos, la Federación intentará enviar más ayuda.

Me sugieren que aterrice en su plantea, pero amablemente declino su oferta, ya que no estoy seguro de que la nave esté en condiciones de volver al espacio si aterrizo en su superficie. Les pido que me explique sus problemas y compartan sus datos conmigo, ellos aceptan. Pero las erupciones de energía han afectado a sus sistemas y costará horas en que me llegue toda la información.

Mientras hablo con ellos y voy analizando la información que va llegando, me voy haciendo una idea de lo que sucede.

El planeta esta dividido en dos sistemas políticos o culturas, colaboran en muchos campos, pero en otros actúan independientemente. La parte que ha pedido ayuda es la que está más expuesta a la estrella, y es la que esté sufriendo más daños. El otro sistema político es el que ha enviado el cohete, y no están viéndose tan afectados, al estar en el lado contrario a la estrella.

Contra lo que podría parecer, todos los planetas que hay en el interior de la nebulosa están generosamente iluminados por la luz multicolor que rebota en la superficie de la nebulosa y que ha sido generada por las dos estrellas. Es una luz muy potente, que casi hace daño a los ojos y que llena todo el hueco, casi no existen sobras en los planetas. Los Luminis son seres casi luminosos y que entre ellos se comunican mediante las sombras que hacen con sus manos. Una civilización que vive envuelta en luz y que utiliza las sombras para comunicarse, fascinante.

Al cabo de unas horas logro comprender lo que sucede. Ambas civilizaciones utilizan una gran cantidad de recursos, la mayoría de ellos basados en el reciclaje y en fuentes de energía que generan muy pocos residuos. Sin embargo, los pocos residuos que generan son muy peligrosos y recientemente ambas culturas llegaron a un acuerdo para reunirlos y enviarlos al espacio y así deshacerse de ellos.

Al analizar la información de los residuos descubro que su mezcla es la que genera la gran onda energética al reaccionar con la estrella, al chocar con su superficie y ser consumidos por ella. La civilización que envía los cohetes desconoce esto, creen que se pierden en el espacio, hace poco que han empezado a enviar los cohetes y la otra cultura no les ha informado de nada.

Al conocer lo que sucede, deciden no enviar mas cohetes hasta encontrar otra alternativa. Ahora no la tienen, pese a ser culturas muy avanzadas, no han desarrollado los viajes espaciales, ya que no han sentido la necesidad de hacerlo.

Aunque no he bajado al planeta, he estudiado los problemas a los que se enfrentan las civilizaciones y descubro, para mi asombro, que son civilizaciones que no poseen cultura de la prevención ni la preparación ante los riesgos. Por ello, cuando empezaron a sufrir los efectos de las ondas energéticas, se vieron totalmente superados, al no haber previsto nada ni haber preparado a la población.

Con la esperanza de que la Federación no me castigue con ello, y puesto que ya han entablado contacto anteriormente, decido enviarles una copia de los procedimientos de emergencia y de prevención de la Federación ante situaciones de fallos energéticos y fallos de la tecnología. Básicamente consisten en que preparen almacenes de emergencia ante situaciones de fallos, con suministros de alimentos y de medios de supervivencia e higiene. También les sugiero que investiguen tecnologías alternativas para erradicar sus residuos. Y también les sugiero que creen un cuerpo de voluntarios que se preparen para responder ante emergencias y poder ayudar a sus congéneres. Me agradecen mucho la información y me dicen que van a estudiar todo ello con calma y atención. Además, me comprometo a comunicar al Mando de la Flota y a la Federación sus problemas, para que evalúen cómo pueden ayudarles.
Me agradecen la asistencia, sobre todo que les haya ayudado a detectar el origen de sus problemas y me despido de ellos amistosamente.

Pongo rumbo a la nebulosa y con gran esfuerzo, no soy el gran piloto que es el comandante, logro atravesar la nebulosa; no sin llevarme varios sustos y dañar un poco la nave.

Cuando logro abandonar aquella mezcla de gases, polvo y energía, detecto a varias naves emitiendo señales tratando de comunicar con nosotros; cuando respondo, noto un gran alivio. Hace varios días que no tiene noticias de nosotros, poco mas de una semana, y se temían lo peor.

Les informo de mi situación y cuando llego a la base estelar los servicios médicos se disponen a atender a mis compañeros. Por fortuna mis cuidados los han mantenido estables y podrán recuperarse en unos pocos días.

Tras enviar un informe completo a la flota y al Federación me dispongo a dormir largo y tendido. Espero que no me pidan participar en mas misiones en unos días. Aunque en la flota, nunca se sabe.